Aspectos Historicos

La Inquisición Española fue una institución establecida en el siglo XV por los reyes católicos de España, Fernando II de Aragón e Isabel I de Castilla. Su principal objetivo era mantener la ortodoxia religiosa en el país y perseguir a aquellos que se desviaban de la fe católica.

Durante más de tres siglos, la Inquisición Española tuvo un gran poder y utilizó métodos bastante brutales para lograr sus objetivos. Realizaban juicios a personas sospechosas de no seguir la fe católica, como herejes, brujas o judíos. Muchas veces, estos juicios carecían de las garantías legales básicas y se usaba la tortura para obtener confesiones.

Si alguien era encontrado culpable, enfrentaba penas severas, que incluían la confiscación de sus bienes, prisión perpetua o incluso la muerte, a menudo mediante la quema en la hoguera.

Aunque se la asocia principalmente con España, la Inquisición también tuvo influencia en otros lugares bajo el dominio español, como América Latina y Filipinas. Su legado sigue siendo objeto de debate, ya que algunos la ven como un instrumento de represión, mientras que otros creen que defendía la ortodoxia católica en un momento de mucha agitación religiosa y política.